
Lo anterior es la consecuencia de los mediocres resultados conseguidos por los clubes nacionales en competiciones de la CONMEBOL en 2008. Ninguno de los cinco representantes que tuvo el país pasó los octavos de final. En Copa Libertadores Boyacá Chicó sucumbió en el repechaje con Audax Italiano; Atlético Nacional cayó en octavos con Fluminense, misma instancia en la que Cúcuta Deportivo fue eliminado por Santos FC.
La Copa Sudamericana fue igual de mala para los colombianos. Deportivo Cali apenas jugó una ronda y en ella perdió con América, escuadra que no superó la siguiente instancia al perder con Botafogo. En conclusión, los brasileros se encargaron de excluir a los mejores equipos nacionales y por eso su liga se ubicó en la quinta posición del mundo y la segunda de Sudamérica.
Los conjuntos argentinos fueron los más destacados pese a no ganar ningún torneo y por eso esta liga se convirtió en la tercera mejor del mundo, increíblemente por delante de la española. El resto de sudamericanos se ubicaron así: Chile (14), Perú (15), Uruguay (22), Paraguay (23), Ecuador (24), Bolivia (52) y Venezuela (70).
Para pensar…
Las actuaciones colombianas en torneos internacionales ha sido mala desde hace tiempo no solamente a nivel de clubes (lo de Once Caldas en 2004 fue algo ajeno a la realidad). La selección tampoco figura hace rato dentro de las principales del continente. Es por eso que lamentablemente debemos aceptar que nuestro fútbol no es uno de los más destacados y así como ahora nos supera el peruano, no falta mucho para que también lo hagan otros como el ecuatoriano y el paraguayo, que ya cumplen mejores actuaciones internacionales. Entonces:
- ¿Qué le hace falta al torneo colombiano para alcanzar posiciones más importantes?
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